Región de la Araucanía tiene cifras mundiales de mortalidad por cáncer de vesícula

ADELANTOS. Se pretende cambiar lamentable estadística a través de nuevas investigaciones.

El triste récord de liderar a nivel mundial las cifras de mortalidad por cáncer de vesícula, ostenta la Región de La Araucanía existiendo múltiples factores que podrían explicar estos altos índices, los que a la vez alientan a buscar mejores y más efectivos tratamientos.

Según datos del Ministerio de Salud, el cáncer a la vesícula es de alta frecuencia en nuestro país, provocando el fallecimiento de 1.834 chilenos en los últimos años. Por cada 100 mil habitantes las localidades de menos incidencia presentan 1,3 y 0,8 casos en mujeres y hombres respectivamente. Cifras que se elevan entre 10 y 15 en mujeres y 3,5 – 7,0 en hombres. No obstante Chile, sobrepasa estas últimas cifras, alcanzando los 28 casos en mujeres y 9,4 casos en hombres en la provincia de Valdivia a comienzos del siglo.

Araucanía norte

La información manejada por el propio Ministerio de Salud señala que el cáncer a la vesícula presenta importantes variaciones dependiendo de cada región, observándose principalmente en la VIII, IX y X regiones y con menos niveles en las regiones II, III y XIII. En todo el país, la zona norte de la Región de La Araucanía presenta los índices más altos de mortalidad en el mundo, vinculándose esto a la presencia de población femenina mapuche principalmente por el consumo de determinados alimentos.

«Es la zona norte de la Región de La Araucanía la que posee la mortalidad más alta del mundo, con 38,2 casos por 100 mil habitantes. Por lo tanto, podemos señalar que son las mujeres mapuches el grupo con mayor peligro de presentar esta enfermedad», señala la doctora Mercedes López, investigadora del Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia, IMII y académica de la Universidad de Chile.

Lo anterior, se encuentra reforzado por los antecedentes expuestos en forma anterior en el primer «Atlas de Mortalidad en Chile 2001-2008» elaborado por investigadores de la Universidad de Talca donde queda establecido que el cáncer de vesícula biliar y el gástrico es la principal causa de muerte de los habitantes de La Araucanía.

Según explica el doctor Héctor Losada, cirujano bilipancreático de Clínica Alemana Temuco, en más del 90% de los casos, «el cáncer de vesícula se asocia a la existencia de cálculos que actúan como cuerpos extraños e irritan la pared de la vesícula durante años, aunque también existen genes (oncogenes) que se asocian al desarrollo de esta enfermedad», dice.

Estos cálculos son sin duda la principal causa de este cáncer, cuya incidencia en Chile es de un 50% en las mujeres mayores de 50 años, estimándose a la vez que, el 40% de las mujeres con sobrepeso, pueden llegar a tener 160% más de probabilidades de morir de cáncer, especialmente de vesícula biliar, mama, cuello uterino, endometrio y ovario.

La mayoría de los tumores de vesícula no se sospechan antes de la colecistectomía (cirugía para extirpar la vesícula), procedimiento que se realiza en personas con cálculos. Por eso, es muy importante, según el médico, que aquellas personas con antecedentes de dolor abdominal, intolerancia a la comida grasa y coloración amarillenta de ojos y piel (ictericia), se realicen un chequeo que consiste en una ecotomografía de abdomen, en búsqueda de cálculos en la vesícula.

Los cálculos pueden ser tan pequeños como un grano de arena o tan grandes como una pelota de golf y a todos los pacientes portadores se les debe realizar un procedimiento denominado colecistectomía (extirpación de la vesícula), ya que es la única manera de determinar de manera temprana la existencia de cáncer.

Por ello, para el doctor Losada es fundamental que las personas de La Araucanía se chequeen debido a la alta prevalencia de esta enfermedad en esta zona del país, lo que se explicaría por un componente genético ligado a la etnia mapuche y a ciertas condiciones ambientales que aún no están bien determinadas.

Diagnóstico

Un aspecto importante a considerar es que el cáncer vesicular no presenta una sintomatología clara y específica, situación que originaría un diagnóstico tardío y con ello un mal pronóstico.

«Generalmente los pacientes acuden a los servicios médicos cuando presentan dolores muy fuertes o manifiestan ictericia, lo que indica que estamos frente a una etapa muy avanzada y en muchos casos diseminada de la enfermedad. En este caso podemos hablar de una sobrevida de 12 meses desde que se prescribe la enfermedad», enfatizó la doctora Mercedes López, investigadora del Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia.

Si bien el actual mecanismo de prevención de este cáncer es la operación para extirpar la vesícula o colecistectomía, esta fue introducida como patología GES para las personas de 35 a 49 años. Sin embargo, la doctora López explicó que no todos los pacientes presentan síntomas en este rango etario, por lo que al no ser diagnosticadas en esa etapa pierden la cobertura y con ello quedan fuera de la estrategia preventiva.

«La mayor parte de los casos de este tipo de cáncer están relacionados con la presencia de cálculos crónicos en la vesícula biliar, patología extraordinariamente frecuente en mujeres chilenas», según sostuvo la especialista.

Precisamente, alertados por estos índices, los científicos de Instituto Milenio se encuentran investigando los factores relacionados a esta alta frecuencia, así como los beneficios terapéuticos del sistema inmune para combatir esta enfermedad. Esto, considerando además, que en el resto del mundo no existe un grado de exploración relevante sobre este mal.

Por ello, mediante las investigaciones realizadas por el equipo de profesionales del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia (IMII), los académicos esperan poder desarrollar nuevas herramientas terapéuticas para esta enfermedad.

«Sin duda, compartimos muchas patologías con países de Europa y EEUU, pero existen problemas propios de nuestra población y eso debería ser una prioridad para analizar. Ese es el principal motivo por el que hace dos años decidimos comenzar a evaluar los tipos de antígenos más comunes presentes en el cáncer vesicular y qué tipo de respuesta inmune pueden generar los pacientes frente a esta enfermedad», concluyó la doctora Mercedes López.

Esta nota fue publicada en el diario El Austral